jueves, 3 de diciembre de 2009

La República Eslovaca de los Consejos

Uno de los capítulos menos conocidos de lo sucedido en Europa Central tras la Primera Guerra Mundial es la breve historia de la República Eslovaca de los Consejos (Slovenská Republika Rád o Slovenská Rádová Republika - en eslovaco- o Szlovák Tanácsköztársaság -en húngaro), también conocida como la Comuna Eslovaca. Fue un intento de crear un estado eslovaco federal y comunista unido a la comuna húngara, por contraposición a la Checoslovaquia burguesa (que a pesar de las promesas de los dirigentes checos no fue nada respetuosa con las minorías eslovacas durante los años de entreguerras). El intento duró solo un mes, entre el 16 de junio de 1919 y el 17 de julio del mismo año y apenas dejó alguna huella en los acotecimientos posteriores, aunque merece la pena ser recordada aunque solo sea como un ejemplo de lo diferentes que podían haber sido las cosas en entreguerras en Europa Central.

Los territorios que actualmente forman la República Eslovaca fueron parte durante siglos del Reino de Hungría. Tras la Primera Guerra Mundial se proclamó el estado Checoslovaco y se inició una guerra entre Checoslovaquia y Hungría para definir las fronteras entre ambos países. El 31 de octubre de 1918 la monarquía húngara fue derrocada y se proclamó la república. El 21 de marzo de 1919 a la república burguesa le sucedió la República Húngara de los Consejos, un estado comunista que pretendía seguir los pasos de los bolcheviques en Rusia. Al igual que allí, una de las primeras cosas que tuvo que afrontar fue la defensa de sus fronteras ante los ataques de ejércitos extranjeros de potencias occidentales o apoyados por ellas, en el caso húngaro frente a los ejércitos rumanos, checoslovacos, serbios y franceses (sin contar, claro está, la reacción de las clases dominantes tradicionales que no se quedaron a la espera de los acontecimientos).

Tras organizarse el ejército rojo húngaro el 29 de mayo de 1919, éste inició una contraofensiva en el norte que liberó las ciudades industriales de Miskolc y Salgótarján y dio lugar a un avance imparable hasta llegar a la frontera con Polonia (que era la frontera tradicional húngara). En lugar de anexionarse el territorio, los húngaros apoyaron a los comunistas locales y proclamaron en la ciudad de Prešov, el 16 de junio de 1919, la República Eslovaca de los Consejos. El centro de la república consejista sería Košice, la ciudad más importante de la región. Otra ciudad importante para el movimiento fue Lučenec, con importante población húngara.

(monumento en recuerdo a la República Eslovaca de los Consejos, Prešov. Fuente: wikipedia)

El 20 de junio se inauguró el consejo de gobierno revolucionario en Košice. Se eligió a los comisarios del pueblo entre miembros de las minorías étnicas de la zona (eslovacos, húngaros y checos, no tengo información de si los rusinos o rutenos participaron, aunque también están presentes en la zona). El líder de la república eslovaca de los consejos fue el periodista revolucionario checo Antonín Janoušek (1877-1941).

(Janoušek en un mitin. Fuente: wikipedia)

Los comisarios del pueblo fueron los siguientes:

- comisarios del pueblo de asuntos exteriores: Ernő Pór (1888-1939) y el propio Janoušek

- comisarios del pueblo para la guerra: Ján Vavrica y Július Kovács

- comisarios del pueblo para asuntos internos: Jozef Hamzík y los periodistas Wiliam Bojan (Vilmos Baján) y František Fehér,así como Jozef Sluka (1893-1974)

- agricultura: Štefan Mokráň y Jozef Czapai

- comercio y ferrocarriles: Ján Hirossik (1887-1950) y Jozef Varecha,

- justicia: Mikuláš Ungár y Vladimír Černý

- asuntos sociales: Samuel Csapó (1883-1947) y Gustáv Flenscher

- educación: Václav Suk y Eduard Krompaský

- abastecimiento público: Štefan Stehlík

- sanidad y bienestar social: L'udovít Jakab

El encargado de organizar el Ejército Rojo eslovaco fue Ferenc Münnich, que más tarde luchó como brigadista internacional en España y luego llegaría a ser uno de los hombres fuertes de la República Popular Húngara (la mano derecha de János Kádár, hasta su muerte en 1967).

(proclamación de la República Eslovaca de los Consejos en Prešov el 16 de junio de 1919. Fuente: wikipedia)

Las primeras medidas que se tomaron siguieron el modelo de la Rusia Bolchevique y de la Hungría de los Consejos, aunque debido a la breve existencia del estado obrero eslovaco muchas de ellas no se llevaron a cabo: nacionalización de empresas de más de 20 trabajadores e instituciones financieras, control estatal de la enseñanza, introducción de la jornada de trabajo de 8 horas, supresión de la obligación de pagar impuestos para los campesinos, sanidad gratuita, enseñanza obligatoria hasta los 14 años, prohibición del trabajo infantil y del castigo físico a los niños en las escuelas, igualdad de derechos ante la ley para hombres y mujeres, supresión de la propiedad privada sobre la tierra y la vivienda. Se anunció también el principio de igualdad para todas las lenguas habladas en el territorio eslovaco.

La república dependia en gran medida del apoyo húngaro y en cuanto este faltó se derrumbó. Los comunistas húngaros, sin poder contar con la ayuda de los bolcheviques rusos (estaban en el peor momento de la guerra civil rusa) se encontraban aislados, presionados en todas sus fronteras, y buscaban ansiosamente alguna salida que les proporcionara un respiro. El 13 de julio de 1919, George Clemenceau ofreció una propuesta a los húngaros: retirada de los territorios checoslovacos a cambio de detener la ofensiva rumana en el este. Los húngaros cumplieron el acuerdo e inicieron la retirada. Se produjeron manifestaciones de protesta contra el "acuerdo imperialista de paz” en Košice, Prešov y Lučenec, pero la república eslovaca se quedó sola. Y mientras las tropas comunistas húngaras se retiraban, las tropas checoslovacas y rumanas incumplieron el acuerdo y contraatacaron. Los checoslovacos atacaron al ejército húngaro en retirada y los rumanos iniciaron una ofensiva que a la postre les llevaría a Budapest. Fue el principio del fin de la República Húngara de los Consejos y por ende, también de la eslovaca. Para el 17 de julio el ejército checoslovaco dominaba toda la región.

El gobierno eslovaco revolucionario huyó y se instaló de manera provisional en el norte de Hungría, en Miskolc, cuando cayó la república soviética húngara sus líderes fueron juzgados y condenados a varios años de prisión. Janoušek sería entregado posteriormente a la URSS en un intercambio de prisioneros y recibiría la nacionalidad soviética. Su historia es curiosa, siguió dedicado a la política en la República de Chuvashia (en la URSS), y allí es conocido, incluso hoy en día, entre otras cosas por ser el fundador del horfelinato de Cheboksary, capital de la región. Se le conoce como "el amigo del pueblo chuvash”. Murió en 1941, parece ser que de muerte natural, aunque en algunas fuentes se menciona que murió víctima de la represión.

Las pocas informaciones que he podido encontrar sobre la "primera experiencia comunista eslovaca” suelen resaltar la falta de apoyo entre la población local. Pero teniendo en cuenta que son fuentes no muy objetivas no sé hasta que punto es cierto. La verdad es que no sobrevivió, pero también lo es que la región fue la zona de Eslovaquia con mayor influencia comunista tanto desde el punto de vista cultural como del político - especialmente el primero- hasta la Segunda Guerra Mundial.

Otras fotos pueden verse en esta interesante página dedicada a la República Húngara de los Consejos, por ejemplo:

(la población de Košice recibe con entusiamos a la sexta división del Ejército Rojo húngaro, que entra en la ciudad el 6 de junio de 1919)

Un interesante documental (en eslovaco) de 1989 sobre la República Eslovaca de los Consejos. Tiene imágines muy curiosas, como de la visita de Tibor Szamuely, uno de los líderes de la Comuna húngara a Moscú y su encuentro con Lenin, o de la entrada de las tropas comunistas húngaras en Košice y su recibimiento por la población, así como de un discurso de Béla Kun - líder de la comuna húngara, en la misma ciudad:



Fuentes: Cheb.ru, Magyar Katolikus Lexikon, wikipedia rusa, checa, eslovaca y húngara

domingo, 15 de noviembre de 2009

Imre Kertész: han falsificado mis palabras

(Kertész habla con los estudiantes de la universidad de Szeged, 2007. Foto: wikipedia)

Se comentaba en la entrada anterior la polémica que se había levantado en torno a la entrevista que le hizo a Imre Kertész el periódico alemán Die Welt. Vuelvo al tema porque se las trae. Mencionar que las partes más polémicas de la entrevista no son las que aparecen en la entrada anterior, ya que tuve la suerte de usar una traducción correcta del alemán al húngaro. En cambio, la mayoría de los periódicos y páginas de internet del país usaron la traducción de la MTI (algo así como la Agencia EFE húngara), en la que se ponen en boca de Kertész las expresiones "no me considere usted húngaro" (cuando en realidad decía algo así como "no me ponga la etiqueta de Hungría") y que "ahora la extrema derecha y los antisemitas dominan el país" (por "ahora el discurso de la extrema derecha y de los antisemitas es el predominante"), que son las que más polémica han creado. En el Magyar Nemzet (Nación Húngara - que podría ser el equivalente al ABC en España), uno de los periódicos más importantes, se titulaba el artículo como "El país de mentirosos y antisemitas. Imre Kertész ultraja a los húngaros", mencionando una frase que Kertész no pronunció (dijo "La vieja pasión húngara, la hipocresía, la tendencia a la intolerancia, es en la actualidad tan característica como lo ha sido siempre"), ya que en la traducción de la MTI en lugar de la palabra "hipocresía" se usaba la palabra "mentira".

Por todo esto, Kertész ha tenido que explicar sus palabras y dar su opinión sobre el asunto. Lo ha hecho por teléfono en el canal Duna TV. El momento del informativo en el que se trató el tema y se habló con Kertész se puede ver aquí (en húngaro, claro). El escritor acusa a ciertas páginas de internet de organizar una campaña contra él. Y anuncia que tomará medidas legales.

Las afirmaciones de Kertész son las siguientes:

"Un portal de internet ha falsificado totalmente el texto de mi entrevista con Die Welt. Por supuesto que había frases críticas, pero esas frases no insultaban al país, ni a la nación, ni a la gente. Lo hice con espíritu constructivo, por mucho que algunos se disgusten conmigo. Lo que es indignante es que hayan falsificado un artículo traduciéndolo como lo contrario. Hoy por la mañana me ha llamado desde el Die Welt el autor del artículo para hacerme saber su más absoluta indignación por el asunto. También ha publicado su opinión en internet. "

Luego le preguntan si planea alguna medida por lo que ha sucedido:

"Por supuesto, me gustaría que el público, los húngaros que me leen, supieran la verdad. No es la primera vez que inician una campaña de calumnias contra mí. [...] Siempre toman mis críticas como si fueran contra mi nación, y eso no es verdad. Me alegraría poder ser de verdad útil a Hungría, a mi país, y que dijeran la verdad, y no mintieran sobre mí."

Por último le preguntan si considera a Hungría su patria y si se siente atado a ella, a lo que responde decidido:

"Por supuesto que considero a Hungría mi patria, pero si he nacido aquí, soy ciudadano húngaro y escribo en húngaro. Lo que no soy es nacionalista. " (por cierto, esta última frase no aparece escrita en el artículo, aunque en el video se escucha con toda claridad).

Por supuesto después de estas declaraciones ha continuado la polémica ya que en el texto original (o digamos bien traducido) hay críticas bastante duras a la situación de Hungría. La polémica ha llegado incluso al parlamento, donde el liberal Péter Gusztos (SzDSz) habló en defensa de Kertész y criticó al Magyar Nemzet.

(Portada del libro de Kertész "Kaddish, por el hijo aún no nacido")

Kertész es uno de los personajes "menos apreciados" por la derecha antisemita y nacionalista húngara, que está cada vez más de moda. Aprovechan cualquier oportunidad para atacarlo, como ha sucedido ahora.

viernes, 13 de noviembre de 2009

Imre Kertész: No escribo literatura del holocausto, escribo solo novelas

(Imre Kertész en 1999)

La revista alemana Die Welt ha realizado una entrevista al escritor húngaro Imre Kertész, premio Nóbel de literatura, en ocasión de su ochenta cumpleaños. En la entrevista Kertész realizaba ciertas declaraciones sobre Hungría que han sentado bastante mal en el país y se ha creado una gran polémica en torno al escritor. Dejo aquí, en primer lugar, la entrevista. La he traducido del húngaro (alemán no sé), a partir de la versión que se publicó en el excelente blog húngaro Könvesblog (Blog de libros). En las próximas entradas se tratará más en concreto de la polémica.

- Señor Kertész, el 9 de noviembre cumplirá usted ochenta años, sin embargo el mejor regalo de su cumpleaños no lo recibe usted, sino otro.
- ¿Sí? Y ¿quién es?

- Berlín, por supuesto, ya que usted sigue viviendo aquí, entre los muros de la ciudad.
- !Qué cosas tiene! Yo soy de Berlín.

- Curioso, yo había leído que es usted de Budapest.
- Usted lee demasiado. Se lo explicaré. Soy una persona cosmopolita, y siempre lo he sido. Una persona cosmopolita no puede pertenecer a Budapest, la ciudad se ha vuelto completamente balcánica. Una persona cosmopolita, en cambio, puede pertenecer con toda tranquilidad a Berlín.

- ¿Qué es lo que le maravilla tanto de aquí?
- De eso podría hablar mucho, permítame que le mencione dos cosas. Berlín es la metrópolis más musical del mundo. Es una de las principales razones de por qué vivo aquí desde hace ocho años. Cuando residía aún en Budapest, tenía que llevarme la radio al baño continuamente para poder escuchar música ya que era el único lugar donde la señal era buena. Aquí hay tres casas de la ópera a dónde puedo ir cuando me apetece, sin hablar de las maravillosas filarmónicas. Para un amante de la música esto es el paraiso. Y la atmósfera de la ciudad es agradable, urbana. Sobre todo aquí, en Charlottenburg. Es tan agradable ver como pasea la gente por la calle, como se sientan en las terrazas de las cafeterías. Leen, comen, beben e incluso flirtean. Berlín en verano es como un centro de descanso sin igual, ¿qué más podría decir?, como una sauna relajante. Todos hacen lo que quieren e incluso de la manera más natural del mundo. No hay estrés, no hay violencia. La gente es amistosa unos con otros, y también lo son conmigo. Esa es mi experiencia, desde el primer minuto que he pasado aquí hasta hoy.

- ¿Y en Budapest no puede hacer todo eso? Cuando me enseñó la ciudad hace diez años yo también la encontré alegre y colorida.
- Como turista puede que sí, pero es solo apariencia. No hace mucho pasé diez días seguidos en Budapest . En los últimos diez años la situación ha empeorado completamente, ahora el discurso de la extrema derecha y de los antisemitas es el predominante. La vieja pasión húngara, la hipocresía, la tendencia a la intolerancia, es en la actualidad tan característica como lo ha sido siempre. Hungría en la guerra, Hungría y el fascismo, Hungría y el socialismo: de todo eso no han aprendido nada, lo han disfrazado con una capa de adornos.

- Usted nació en Budapest, vivió allí su infancia y tras pasar por el campo de concentración de Buchenwald, regresó a la ciudad. Allí surgieron sus obras más importantes, por las cuales recibió en el 2002 el Premio Nóbel, sobre todo por "Sin destino" (Sorstalanság), que se editó en 1975, después de doce años de trabajo. La literatura de su país es extraordinariamente rica. Ciertamente ¿no hay nada que le ate a su país?
- Soy producto de la cultura europea, un decadente, si le parece, una figura que ha perdido sus raíces, !no me ponga la etiqueta de Hungría! Ya es bastante con que sus compatriotas hayan hecho de mí un judío. Para mí, ni las ataduras raciales ni nacionales tienen la menor importancia. Y ya que ha mencionado el ambiente literario húngaro, le revelaré que durante los años del socialismo no leí ni un solo libro apoyado por el estado. Sencillamente mi gusto no lo permitía. Siempre que lo intentaba se me revolvía el estómago. Por supuesto hay unos cuantos escritores húngaros a los que respeto profundamente. Son artistas de la lengua dignos de admiración, autores decadentes de naturaleza juguetona, cuyos nombres, aquí en Alemania no les dirán nada. Por ejemplo Gyula Krúdy, que vivió entre 1878 y 1933, o Dezső Szomory, contemporaneo de Krúdy, y a la vez ambos extraordinarios ensayistas...

- ¿Como Sándor Márai, a quien usted también considera un grande?
- Como Márai, cuyos diarios son, en mi opinión, geniales. Sus novelas no tanto, no son la cumbre de la modernidad. Por supuesto en Hungría no ha habido modernidad literaria. Mucho después de la guerra Péter Nádas y yo llenamos ese vacío y luego llegó el postmoderno Péter Esterházy. Cuando era un joven escritor solía leer literatura europea, sobre todo alemana.

- ¿Quién tuvo especial influencia en usted?
- Thomas Mann, sin ninguna duda. En 1954 György Lukács tradujo los primeros textos de Mann tras la guerra, yo prácticamente los devoraba. "Muerte en Venecia" o "La sangre de los Welsa" cambiaron mi vida.

- "La sangre de los Welsa", con su caricatura del antisemita...
- A mi no me interesan las ideas, me interesa la estética. Y, con la mano en el corazón, judíos vanidosos, nuevos ricos, como los descritos por Mann en 1910 existen sin ninguna duda. ¿Por qué habría que echárle esto en cara al escritor?

- Después de Auschwitz no es posible tratar este tipo de cosas de manera muy desapasionada...
- Quizás, pero eso a mí no me molesta. ¿Sabe? soy un poco testarudo respecto a la Shoa. Al igual que Ján Améry, soy un judío no judío. Continuamente volvemos a nuestra identidad colectiva. A mí eso no me gusta. Tampoco me gusta la música tradicional, el Klezmer es aburrido.

- Pero ha escrito muchos libros sobre el holocausto.
- He escrito sobre el holocausto porque tuve que vivir, y logré sobrevivir, esa experiencia única, esa experiencia característica del siglo XX. Porque estuve en Auschwitz y en Buchenwald. Piénselo: qué inmenso capital. Pero yo no he hecho literatura del holocausto, yo he escrito novelas. Soy escritor profesional. Toda frase original, toda palabra adecuada, perfecta, me causó placer. Toda mi motivación fue siempre y ante todo artística.

- ¿Es por eso por lo que usted no escribe sobre el exterminio de los judíos desde un punto de vista moral?
- Entre otras cosas así es. Por supuesto hay algo más: no se debe mirar de manera aislada el experimento de exterminio, el antisemitismo racista del siglo XX. Hay que verlo en relación con la época y en relación con el totalitarismo. El totalitarismo no acabó con el final del dominio nazi. En un país como Hungría, además de eso, se puede ver que con la desaparición de los nazis no desapareció el antisemitismo.
- Los que leen sus libros, no solo Sin destino, sino su continuación, "Fiasco", o su última novela, "Liquidación", pueden percibir el tono irónico, sarcástico, burlón, tan propio de Kertész. Este estilo, ¿lo ha desarrollado tras un largo trabajo?, ¿o es aplicable el conocido dicho de que "el estilo es el propio hombre"?.
- Sí, es válido. Tiene su origen en mi propia forma de ser.

- Al principio hablamos del regalo por su cumpleaños. ¿Hay algo que deseara especialmente?
- Deseo para mí mismo lo que para todos los hombres: paz y cultura.

Tilman Krause, 7 de noviembre del 2009

Nota: la foto de Kertész es de la Biblioteca Electrónica Húngara (MEK)

El poeta y cantor de la libertad

Así llaman algunos al cantautor checo Karel Kryl. Esta entrada no tiene que ver directamente con Hungría, solo en cierta medida, aunque por otro lado, tiene mucho que ver, ya que a fin de cuentas refleja muchas cosas que los húngaros han vivido durante el siglo XX y lo que llevamos del XXI (sin contar, claro está que Checoslovaquia tuvo sus minorías húngaras).

Karel Kryl (1944-1994), cantautor checo, poeta con guitarra, como también era conocido fue una de las voces más características de la música checa del siglo XX. El principal representante de la canción protesta checa. Sus letras siempre estuvieron vinculadas a la política y a la crítica social de la realidad que vivía, en principio frente al comunismo, sus canciones son un fiel reflejo de los sentimientos de la generación que vivió la Primavera de Praga. Por eso mismo tuvo que emigrar en 1969 y se instaló en Alemania. Regresó a Checoslovaquia en 1989 y desde entonces sus canciones fueron una reacción contra lo que pasaba en el país, contra las reformas ultraliberales de Václav Klaus, y contra la separación de Chequia y Eslovaquia. Muchos le reprocharon ser un eterno rebelde. Finalmente volvió a emigrar a Alemania, descontento con lo que veía en su país. Murió allí en 1994.

Dice Markéta Matoušková, en su libro "1063 días con Karel Krym" que "murió porque su tierra natal se había convertido en la provincia occidental de los EEUU con una cultura totalmente artificial y que había dejado de ser un lugar en el que el papel dominante recaía en la cultura. No quería ver su desolación..."

Voy a dejar aquí una canción suya, nada conocida por que no llegó a publicarse nunca en disco. La escribió en 1993 y da una visión bastante fuerte de la democracia checa de la época. Respecto a la traducción del texto, es mía, espero no haber cometido errores, aunque alguno habrá (mi conocimiento de checo se reduce a un mes de clases en los cursos de la embajada en Budapest y al parecido del checo con el eslovaco, que es muy grande, ... pero no tanto).




Democracia (1993) - Karel Krym

Hoy soy el mismo, le digo a usted, como antaño. No soy diferente. Me pudro en silencio en el basurero de la historia ...

Democracia floreciente aunque con defectos de cosmética.
Aquellos que robaron hasta el verano, roban ahora el doble.
Aquellos que nos tiranizaron durante años, hoy nos echan del trabajo,
Y a aquellos que cantaban la verdad, hoy los han hecho traidores.

La democracia prospera, pragmática, sin nosotros,
farfullamos junto a una cerveza, como lo hemos hecho siempre antes,
el cura nos prometió los cielos y espera ahora su dinero.
Y nosotros alimentamos las máquinas tragaperras con dos o tres duros.

Reina la democracia, nos cantan Gott y Walda,
nos alimentamos de soja, de pie, en el McDonalds,
el rey Václav, una pandilla con trastos de estraperlo,
una pandilla bajo tejado, yo en medio del arroyo.

Gobierna la democracia desde Aš hasta Humenné
Hay terciopelo y ternura en la gente, y dientes rotos,
nos han puesto nuevos arreos y aunque el collarín nos hiera,
ocupamos nuestro puesto, el lugar adecuado.

La democracia madura en úlceras de estómago,
sin honradez, sin derechos, y sobre todo sin ningún miramiento,
un error privado, quizás por un engaño de la vista,
en lugar de corazón tiene barriga, y en lugar de alma, hocico.
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Jsem dnes stejen, pravím Vám, jako kdysi. Nejin. Tiše sobě zahnívám na smetišti dějin...

Demokracie rozkvétá, byť s kosmetickou vadou:
ti, kteří kradli po léta, dnes dvojnásobně kradou,
ti, kdo nás léta týrali, nás vyhazují z práce,
a z těch, kdo pravdu zpívali, dnes nadělali zrádce.
Ti, kdo nás léta týrali, nás vyhazují z práce,
a z těch, kdo pravdu zpívali, dnes nadělali zrádce.

Demokracie prospívá bez nás a pragmaticky,
brbláme spolu u píva, jak brblali jsme vždycky,
farář nám slíbil nebesa a čeká na majetky,
my nakrmíme forbesa za dvě či za tři pětky.
farář nám slíbil nebesa a čeká na majetky,
my nakrmíme forbesa za dvě či za tři pětky.

Demokracie zavládla, zpívá nám Gott i Walda,
zbaštíme sóju bez sádla u strejdy McDonalda,
král Václav jedna parta je se šmelinářským šmejdem,
pod střechou velké partaje se u koryta sejdem.
král Václav jedna parta je se šmelinářským šmejdem,
pod střechou jedné partaje se u koryta sejdem.

Demokracie panuje od Aše po Humenné,
samet i něha v pánu je a zuby vylomené,
Dali nám nové postroje a, ač nás chomout pálí,
zaujímáme postoje, místo abychom stáli.
Dali nám nové postroje a, ač nás chomout pálí,
zaujímáme postoje, místo abychom stáli.

Demokracie dozrává do žaludečních vředů,
bez poctivosti, bez práva a hlavně bez ohledů,
a je to mýlka soukromá, snad z optického klamu,
že místo srdce břicho má a místo duše tlamu.
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En Chequia se menciona a veces los versos de la canción:

Demokracie rozkvétá, byť s kosmetickou vadou:
ti, kteří kradli po léta, dnes dvojnásobně kradou.


Democracia floreciente aunque con defectos de cosmética.
Aquellos que robaron hasta el verano, roban ahora el doble.

como todo un resumen de lo que ha pasado en estos últimos veinte años. Me imagino que muchos húngaros se sienten también identificados con la frase.

Notas a la canción:

me imagino que por Václav se refiere a Václav Klaus. El terreno entre Aš y Humenné era Checoslovaquia.


Fuentes: Radio Praha, Wikipedia, YouTube, Slovo

Política húngara en Eslovaquia: Bugár versus Csáky

(Kežmarok, una preciosa ciudad del centro de Eslovaquia, al fondo los montes Tatra)

Mañana se celebran elecciones regionales en Eslovaquia y por primera vez en mucho tiempo no se presentará sólo un partido húngaro, sino dos. Se promete interesante interpretar cómo valorarán los húngaros la visión que tiene cada uno de los candidatos sobre la relación con los eslovacos.

En el periódico Népszabadság se ha entrevistado a los líderes de los dos partidos, Pál Csáky, del MKP, el Partido de la Coalición Húngara, que hasta ahora disfrutaba de exclusividad en la representación de los húngaros, y Béla Bugár, quizás el político húngaro más popular en Eslovaquia en los últimos años, y el único que también lo es entre los eslovacos, y que se presenta a las elecciones con su nuevo partido Híd ("puente"). Sólo una consideración a tener en cuenta respecto a la entrevista, Népszabadság está bastante lejos de las posiciones que defiende Csáky (nacionalista húngaro).

(Catedral de Aleksander Nevski, en Prešov, en la zona oriental de Eslovaquia, donde vive la minoría rusino-rutena y ucraniana)

Un par de apuntes más antes de pasar a la entrevista en sí. Es la tercera vez que los eslovacos celebran este tipo de elecciones para elegir a los representantes de lo gobiernos locales en cada región y hasta ahora el principal triunfador ha sido la abstención (en el 2005 la participación fue ridícula, del 18% en la primera vuelta y del 11% en la segunda, ahora se calcula que estará entre el 15 y el 20%). En cinco de las ocho regiones eslovacas hay minorías húngaras: en Nitra la población húngara es el 27,6% de la total de la región, en Trnva el 23,7%, en Banská Bystrica el 11,7%, en Košice el 11,3%, y en Bratislava el 4,6%. A veces los partidos húngaros se presentan en coalición con otros partidos eslovacos, pero generalmente lo hacen solos. Por el carácter de las elecciones son importantes los acuerdos entre los diferentes partidos y es normal que se presenten candidatos independientes con el apoyo de diversos partidos diferentes (ya que se eligen los presidentes de cada región). En algunos casos hay coaliciones cuyo único elemento unificador es ir en contra de los húngaros. Es el caso de Nitra donde el actual presidente, Milan Belica será apoyado por partidos tan diferentes como Smer (socialistas, en el poder), SDKÚ (la oposición de derechas) o ultranacionalistas (SNS - Belica no es su candidato pero lo apoyan).

(Vista del castillo de Trenčín, en la zona noroccidental de Eslovaquia)

Pero pasemos a la entrevista:

PÁL CSÁKY: defender nuestros intereses con firmeza y unidad
- ¿Ya se han calmado los ánimos en el Partido de la Coalición Húngara?
- A pesar de la gente que se ha marchado, por todo el país continúa creciendo el número de afiliados, hay varios cientos de nuevos miembros. En nuestro programa a largo plazo hemos dejado bien claro los tres pilares sobre los que se asienta nuestra identidad, según los cuales somos parte integrante del pueblo húngaro, y a la vez ciudadanos de Eslovaquia y de la Unión Europea. Se mire por donde se mire hemos salido fortalecidos.
- En la asamblea para decidir el programa del MKP y también en otros foros ha sonado con fuerza la idea de la importancia de la unidad entre los húngaros de Eslovaquia. ¿Qué significa esto en concreto? Ya que tanto en el partido Híd-Most como entre los independientes hay importantes personalidades húngaras. ¿Los está excluyendo?
- En cualquier lugar de Europa Occidental solo funcionan con éxito los modelos para los cuales hay un principio director aceptado. El interés de la comunidad y su superviviencia. En esto mismo veo la tésis fundamental para la unidad de los húngaros de Eslovaquia. Y estoy convencido de que sólo el Partido de la Coalición Húngaro lo representa.

- Y Híd, ¿por qué no?
- Desde hace más de noventa años, los húngaros de Eslovaquia hemos asumido que debemos seguir siendo húngaros. Sólo así podemos prosperar en nuestra tierra natal. Hemos creado nuestras propias instituciones culturales y educativas, y deseamos aumentar su número y sus competencias. En la periferia de nuestra comunidad se encuentran los que se han asimilado, o los que tienen una débil conciencia de identidad, porque viven en matrimonios mixtos. El resto de los húngaros se esfuerzan en mantener dentro a este grupo. Pero el nuevo partido se construye sobre ellos, centra su atención en los que refuerzan la división. Sin embargo el objetivo solo debe ser el reforzamiento y la permanencia del conjunto.

- Béla Bugár y sus seguidores quieren construir su programa en base a un diálogo honesto húngaro-eslovaco. Pero nadie niega su nacionalidad, sus creencias, sus puntos de vista. ¿No es ese el único camino posible para la reconciliación, mencionada por tantos, entre húngaros y eslovacos?
- Dicen ese tipo de tonterías, pero en Eslovaquia ese modelo no funciona. Ni uno solo de los partidos eslovacos tiene un programa para las minorías. La oposición en numerosas ocasiones no se atreve a distanciarse de la coalición de gobierno, o no quiere hacerlo. ¿Con quiénes quieren negociar sin ningún tipo de compromiso? El único camino posible es la defensa firme y conjunta de los intereses húngaros.
- Pero lo que sí debilita es que se presenten candidatos separados por el MKP y Híd y que se enfrenten entre sí en las elecciones regionales y en las elecciones generales de junio próximo. ¿No estamos ante un callejón sin salida?
- Estos antiguos compañeros con los que hemos trabajado en los últimos veinte años, salieron en primavera con que estaban a disgusto con mi estilo de dirección y después expresaron sus objeciones con la actual dirección del partido. Y luego anunciaron la creación de una plataforma. Nosotros aceptamos finalmente sus propuestas, pero ellos se marcharon del partido. Ahoran quieren negociar. Si hubieran querido de verdad trabajar con nosotros, habrían permanecido en el partido y habrían continuado con su actividad como una plataforma independiente. Teniendo en cuenta que rechazaron nuestras propuestas, ahora no hay nada de qué hablar.

(Centro de Levoča, que cuenta con uno de los cascos históricos más bellos de Eslovaquia. Es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO)

BÉLA BUGÁR: Arrancar la "carta húngara" de las manos de los nacionalistas.
- Pero ¿es un partido húngaro Híd-Most?
- No sólo hemos fundado una nueva asociación política húngara. Pensamos que hay que ampliar nuestro círculo de apoyos posibles, porque hay que arrancar de una vez la "carta húngara" de las manos de los nacionalistas. Por eso hay que iniciar un diálogo con la mayoría, con los ciudadanos eslovacos honrados, a los que nos gustaría ganar para que entendieran y apoyaran la cuestión de las minorías.
- ¿Con cuánto éxito?
- Por ejemplo, contra la nueva ley lingüística eslovaca también han protestado empresarios del norte de Eslovaquia, que hasta ahora anunciaban sus productos exclusivamente en polaco, o lo hacían en primer lugar en esta lengua, ya que sus principales clientes llegan del país vecino. También han alzado la voz contra la ley los rusinos (rutenos) de Eslovaquia oriental. Ellos también son miembros de nuestro partido. Entendemos la ley lingüística como un problema global eslovaco, como la violación de la democracia, no como un asunto exclusivo de los húngaros de Eslovaquia, como hace el MKP. Gracias a los miembros de nuestro partido, los políticos eslovacos no pueden declarar que solo los húngaros están en contra de la ley y que el resto de las minorías de Eslovaquia no tiene ninguna objeción.
- Algunos opinan que con la excepción de Rudolf Chmel, a pesar de las expectativas que había, ninguna personalidad política conocida eslovaca ha ingresado en el partido. ¿Por qué?
- Analizamos profundamente qué candidatos aceptamos. No queremos saber nada de los que lo hacen por la coyuntura, o ansiando un puesto. Tenemos miembros íntegros, también en el sentido moral, húngaros, eslovacos, ucranianos, rusinos (rutenos), polacos, alemanes y gitanos, que ya antes han demostrado sus cualidades en sus localidades o regiones.
- Hace poco Viktor Orbán declaraba en nombre de su partido y de él mismo que apoyaban por completo al MKP. ¿Cómo entiende estas declaraciones?
- Las críticas que lanzó a Híd podría habérselas dirigido al vicepresidente del MKP, József Berényi, ya que él también defiende que el Foro de Representantes Húngaros de la Cuenca de los Cárpatos no tenga ninguna relación legal con el parlamento húngaro. No le demos razones a los nacionalistas eslovacos para que nos ataquen. Así que en realidad yo no le discuto el derecho a existir al Foro. Me gustaría que fuera una institución exclusivamente consultativa, en el sentido legal del término. En relación al comportamiento de Viktor Orbán, me gustaría indicar que no es nada oportuno que él mismo o su partido, el Fidesz, se inmiscuyan en los conflictos de la política húngara de Transilvania. Sería también un error que lo hiciera aquí, con nosotros.
- ¿No queda debilitada la posición húngara por el conflicto entre el MKP y Híd?
- La cooperación no depende de nosotros. Propusimos que no hubiera dos listas diferentes en las elecciones regionales, que nos pusiéramos de acuerdo en los porcentajes de representación, que les facilitáramos el trabajo a los electores del Sur de Eslovaquia. Pero Csáky y los suyos rechazaron nuestras propuestas y por eso, en muchos lugares, nuestros candidatos se enfrentarán. Deberíamos aprender de la experiencia de 1997, cuando tres partidos húngaros de oposición y dos agrupaciones eslovacas de derechas formaron la Coalición Azul y gracias a eso conseguimos, al año siguiente, arrebatarle el poder a los nacional-populistas de Vladímir Mečiar. Si no lo hacemos, el año que viene no habrá manera de derrotar a Robert Ficó.

(Plaza central de Bardejov, en la zona Nororiental de Eslovaquia)

Nota: para ilustrar el artículo he elegido varios de ciudades eslovacas. Son todas de la wikipedia.

Fuentes: Népszabadság, Pravda, wikipedia eslovaca



Ucrania contra las minorías étnicas

A partir del año que viene las escuelas para las minorías étnicas de Ucrania no recibirán libros en sus lenguas correspondientes sino sólo en ucraniano. La medida ha sido tomada en el marco de un conjunto de disposiciones para que el ucraniano sea lengua obligatoria en todas las escuelas del país. Por esa misma razón va a desaparecer la edición de libros en lengua húngara en Ucrania ya que no existe ninguna editorial privada, solo estatal, y que se dedica principalmente a proporcionar libros a las escuelas. La medida no afecta solo a las minorías húngaras, sino sobre todo a la rusa y también a la rumana y la polaca (que son las que disponen de escuelas estatales). En Ucrania hay 1800 escuelas donde la enseñanza se imparte en ruso, 100 en húngaro (la gran mayoría concentradas en la provincia de Transcarpatia) y otras 100 en rumano, además de 4 en polaco.

Por supuesto un elemento a tener en cuenta son las próximas elecciones ucranianas, aunque no está muy claro cuándo se celebrarán ya que se baraja la posibilidad de que no sean en enero próximo, la fecha inicialmente aceptada, sino en la primavera (por la epidemia de gripe en el país). No es de extrañar que el partido que representa a las minorías húngaras (el UMDSz, la Agrupación Demócrata Húngara de Ucrania) haya decidido por unanimidad apoyar a Yanukovich, del Partido de las Regiones, frente a los antiguos líderes de la Revolución Naranja, ya que ha prometido suprimir estas medidas (lógico teniendo en cuenta que Yanukovich representa sobre todo a las minorías rusas).

Fuentes: Népszabadság, Kitekintő

La economía húngara: por los suelos

Se han hecho públicos los datos de la economía húngara para el tercer cuatrimestre del año. Si hasta ahora el panorama era más bien desolador, para sorpresa de los analistas, los del tercer trimestre no han confirmado la posibilidad de una ligera recuperación. La recesión en Hungría continúa.

Según los datos del KSH (la oficina estadística oficial húngara) y Ecostat, el PIB húngaro ha bajado un 7,2% en el último trimestre en relación con el año anterior. La caída es del 1,8% en relación con el trimestre anterior. Los expertos esperaban un descenso de alrededor del 6,6%, algunos incluso hablaban de la posibilidad de un crecimiento positivo respecto al trimestre anterior con lo cual podrían haber anunciado el final de la recesión, como ha sucedido en otros países europeos.

La producción industrial ha bajado un 15% respecto al año anterior (aunque es un 3,7% mayor que en agosto). La crisis se está notando más en la construcción, el consumo interno y la agricultura.

Se espera que para finales del año la recesión sea de un 6,5% y para el año próximo una situación de estancamiento económico.

(PIB húngaro, línea azul: variación trimestral - escala de la izquierda, columna naranja: variación anual - escala de la derecha. Fuente: Porftolio.hu)


Fuentes: Origo, Index, Portfolio (el artículo se puede leer también en inglés aquí).

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Una buena iniciativa: Indavideó film

La página web de Indavideó ha puesto en marcha una gran iniciativa. Ofrecer de manera gratuita, a través de internet, documentales y películas húngaras de los últimos años. Gratis y de manera legal. Por desgracia parece ser que no funciona fuera de Hungría, ya que en otros países los derechos son gestionados por agencias con las que no se ha firmado acuerdo aún. Así que esta entrada va más bien para los que estéis en Hungría. Las películas están en húngaro (y sin subtítulos), pero bueno, otro aliciente más para estudiar húngaro :)

http://film.indavideo.hu/

Por el momento se pueden ver seis películas recientes, aunque cada semana irán ampliando la oferta: Pánik, Dealer, A kis utazás, Fehér tenyér, Fekete kefe y Overnight.

De ellas la más conocida es "Manos blancas" (Fehér tenyér - en inglés " White Palms"), dirigida por Hajdú Szabolcs en el 2005, una interesante película sobre el mundo de la gimnasia. Sin duda es una de las mejores películas húngaras de los últimos años.

También hay siete cortometrajes, y unos cuantos documentales (entre ellos "Budapest retró" - 1998- por completo, sobre el Budapest de los años 60-70).

miércoles, 4 de noviembre de 2009

martes, 3 de noviembre de 2009

Encuestas: Nostalgia por el comunismo en Europa Central y Oriental

Leo en la página de análisis político Kitekintő el informe del Pew Research Center sobre una amplia encuesta que ha realizado en varios países excomunistas para conocer las opiniones de la población de estos países sobre diversos temas.

Una de las preguntas tenía que ver con la nostalgia sobre la época comunista, aunque hay también otras que permiten valorar los 20 años de capitalismo. Los resultados son sorprendentes, o quizás no tanto. Con la excepción de dos países, en el resto en los que se ha realizado la encuesta, es mayor el porcentaje de gente que piensa que se vivía mejor durante la época comunista que ahora.

(¿Se vivía mejor durante la época socialista? Barra azul: sí. Barra roja: igual. Barra verde: no. La lista de países es Polonia-Chequia-Rusia-Eslovaquia-Lituania-Bulgaria-Ucrania-Hungría, en orden descendente. Fuente: kitekinto.hu)

De entre los países en los que se ha realizado la encuesta, Hungría es el más nostálgico ya que el 72% de los encuestados afirman que se vivía mejor, frente al 8% que piensan que es mejor ahora (la diferencia ha aumentado desde la última vez que ví una entrevista similar, aunque hay que tener cuidado en comprar distintas entrevistas - escribí una entrada sobre una encuesta realizada en el 2008 sobre lo mismo ). En Ucrania o Bulgaria el 62% de los encuestados piensan que se vivía mejor en el comunismo, frente al 12% ahora (en Ucrania) y el 13% en Bulgaria (a su vez el 18% de los encuestados búlgaros piensan que la situación es igual frente a un 13% en Ucrania).

En Lituania, Eslovaquia o Rusia hay mucha más gente que piensa que se vivía mejor antes, aunque son menos de la mitad de los encuestados (en Lituania 48% frente al 23%, en Eslovaquia un 48% frente a un 28%, en Rusia 45% frente al 33%).

Por último, en Polonia o en Chequia, hay más población que piensa que se vive mejor en la actualidad que durante la época comunista, así lo piensan el 45% de los checos frente al 39% o el 47% de los polacos frente al 35%.

Por cierto, se preguntó también sobre a quién ha beneficiado la caída del comunismo: el 17% de los húngaros piensa que a la gente común, el 63% a los que tienen sus propios negocios y el 89% a los políticos (me imagino que se podrían responder varios cosas a la vez). El 77% no está satisfecho con la democracia, un 21% sí lo está.

La encuesta es bastante interesante y por cierto muy amplia, algunas de las preguntas nos permiten ver un poco la razón de esas opiniones y matizar ciertas cosas. Sin ánimo de hacer un análisis profundo, menciono algunos datos.

Por ejemplo hoy sólo el 56% de los húngaros piensa que el sistema multipartidista es bueno, frente al 74% que lo pensaba en 1991. El único país que tiene un porcentaje más bajo en aceptación de la democracia es Ucrania donde sólo el 30% lo apoya frente al 71% de 1991. La economía de mercado es apoyada en la actualidad por el 46% de los húngaros frente al 80% de 1991. Los datos parecen mostrar una desilusión brutal por como están las cosas.

Entre los mayores el porcentaje es aún menor, los jóvenes en cambio aceptan mejor la situación actual.

En la actualidad el 91% de la población húngara piensa que el país va en una dirección equivocada, y el 94% que la situación económica es mala. Sólo el 34% piensa que tienen influencia en los asuntos políticos. El 71% de los húngaros piensa que la entrada en la UE ha tenido efectos negativos para la economía húngara.

Sólo el 15% de los encuestados húngaros están satisfechos con su vida ( en 1991 lo era sólo el 8%) - Hungría está a la cola de los países encuestados.

Se preguntó también por los grupos étnicos más odiados por cada nación. En el caso de los húngaros el 69% tiene mala opinión de los gitanos (solo son superados por Chequia donde el 84% de la población piensa lo mismo y por Eslovaquia con un 78%), el 33% de los rumanos, el 29% de los judíos y el 27% de los eslovacos (en 1991 los porcentajes eran 79%, 31%, 11%, 12%, se observa una disminución en el rechazo hacia los gitanos, aunque ha aumentado de manera preocupante el rechazo hacia los judíos y eslovacos). Solo el 25% de los húngaros encuestados tiene buena opinión de los gitanos. Curiosamente los eslovacos no mencionan a los húngaros como grupos étnicos más rechazados (al menos no aparece en la encuesta), aunque el 34% de la población eslovaca considera a Hungría un país enemigo (el 37% de los húngaros piensa lo mismo de Eslovaquia).

La imagen de EEUU en Hungría ha caído en picado, en 1991 era positiva para el 75% de la población, hoy lo es para el 33%. En el caso de Rusia, era negativa en 1991 para el 56% (se preguntó sobre la URSS), hoy para el 42%.

Entiendo que hay que tener cuidado con las encuestas, pero al menos quizás podamos fiarnos de las tendencias que muestran.

El informe es bastante amplio y plantea otras muchas cosas interesantes. Se puede leer en inglés, así como los datos de la encuesta, aquí.

O un resumen (es que tiene más de 150 páginas) aquí (un resumen).

PD: Una vez publicada la entrada me he dado cuenta de que en húngaro han traducido de manera un poco libre la pregunta sobre si se vive mejor o no en el comunismo. En inglés era ¿piensa que la situación económica es peor, mejor o igual que durante el comunismo? No es exáctamente lo mismo, aunque no creo que cambie las conclusiones.

viernes, 30 de octubre de 2009

Clásicos del rock húngaro: Piramis


Piramis es uno de los grupos húngaros más famosos, se fundó en 1975 y tocaron hasta 1982, aunque después se han reunido por alguna ocasión especial, en algún concierto - homenaje, por ejemplo en 1992 o en el 2006. De entre sus miembros destacaba el cantante Sándor Révész, con su peculiar voz.

Su primer disco se editó en 1977 (Piramis I) y hasta 1982 editaron otros seis más, además de numerosas recopilaciones o conciertos. Como curiosidad algunas de ellos en inglés, en 1980 incluso se editó un disco recopilatorio para el mercado español.

(portada de su primer disco. Por cierto el dulce de la portada se llama "Piramis" - pirámide en húngaro)

Desde el principio fueron un grupo bastante conocido y valorado y realizaron numerosos conciertos por diversos países europeos, incluyendo la URSS.

Algunas de sus canciones más famosas:

1. Kobor angyal (Ángel vagabundo) - en concierto. La canción es de 1979.


2. A becsület (El honor) - el video es de 1977



3. Szállj (vuela) - su segunda canción y una de sus baladas más famosas.



4. Ha volna két életem (Si tuviera dos vidas)




Fuentes: wikipedia y la página oficial del grupo (www.piramis.hu). Las fotos también son de allí.

Secesión en Tîrgu-Mureş (Marosvásárhely)

Tîrgu-Mureş o Marosvásárhely es uno de los centros de cultura húngara de Transilvania (en la actualidad pertenece a Rumanía). En su casco histórico destaca el conjunto del Palacio de la Prefectura con su torre y sobre todo el Palacio de Cultura (a la derecha).

El Palacio de la Prefectura fue construido entre 1905 y 1907 , el Palacio de Cultura entre 1911 y 1913. Ambos fueron diseñados por los arquitectos Marcell Komor y Dezső Jakab.

Detalle de la fachada del Palacio de Cultura. Foto: wikipedia


Mosaico "Tributo a Hungría" de la entrada, sobre la inscripción en rumano y húngaro del Palacio de Cultura. Es obra de Aladár Körösfői-Kriesch. Foto: wikipedia

Otra vista del Palacio de Cultura. Foto: wikipedia

El interior del Palacio de Cultura es espectacular. Aquí podemos ver una de las cristaleras que reflejan antiguas leyendas húngaras. Foto: wikipedia

Como suele ser habitual en Transilvania la ciudad tiene nombre rumano (Tîrgu-Mureş), húngaro (Marosvásárhely) y alemán (Neumarkt am Mieresch), mas su nombre antiguo en latín. Tradicionalmente ha sido una ciudad de población húngara, aunque en el último censo (2002) el 50,3% de la población se declaró rumana, mientras que el 46,7% húngara.

La ciudad se considera la capital de los székely (sículos), grupo étnico húngaro peculiar, propio de esta región.

El Cifrapalota de Kecskemét

Un bello ejemplo de arquitectura húngara de estilo secesión. El Cifrapalota o Palacio Ornamentado de la ciudad de Kecskemét. Construído en 1902 según los planos de Géza Markus. (Fuente: wikipedia)

jueves, 29 de octubre de 2009

A veinte años de aquello...


(Dibujo de György Németh, ya mencionado alguna vez aquí por sus ilustraciones del libro "Trápiti" de László Darvasi. Cartel de la izquierda: Baloldali megoldás - solución de izquierdas. Cartel de la derecha: Jobboldali megoldás - solución de derechas. Cartel de abajo: Rendszerváltás - cambio de régimen. Fuente: www.kisalföld.hu)


Este año se cumple el veinte aniversario de la caída del comunismo en Hungría. Sobre este y otras temas de interés escuché el otro día en la emisora InfoRádió una interesante entrevista a László Pesty, un destacado intelectual de derechas, cercano al Fidesz (la oposición al gobierno socialista), participante en el movimiento que acabó con el régimen comunista, periodista y director de documentales sobre temas espinosos como la nueva realidad social húngara o la violencia policial durante los acontecimientos del 2006. En la entrevista se habló un poco de todo, del avance de la extrema derecha, del futuro de Hungría y también de su pasado comunista, del cambio de régimen, de cómo valora la gente lo que pasó, etc. Hay puntos de la entrevista que me parecen geniales, comparta yo o no la opinión del entrevistado. Por eso me he decidido a escribir sobre ella, en concreto cuando hablan del cambio de régimen y de la postura de la gente ante él. Seguro que muchos se sorprenderán de las cosas que dice Pesty, quiero aclarar que no estoy de acuerdo con parte de su discurso, pero no es eso lo importante, sino que permite comprender un poco la Hungría del 2009. Además la emisora en la que le hicieron la entrevista también está también vinculada a la derecha, lo cual, en mi opinión da más validadez a lo que dice. Por desgracia no la he encontrado por escrito, aunque se puede escuchar en la página web de la emisora InfoRádió, en concreto aquí, claro está en húngaro. Tuvo lugar durante el programa Aréna, de análisis político.

Después de hablar de los acontecimientos del 2006 (los disturbios en contra del gobierno, que acabaron con la ocupación del edificio de la televisión pública y la famosa imagen de los manifestantes dirigiendo un tanque contra la policía, que dio la vuelta al mundo), así como de lo que le espera a Hungría con el futuro gobierno de la derecha, el entervistador cambia de tema bruscamente y sorprende a Pesty con una curiosa pregunta: ¿Ha existido el cambio de régimen? Y no es baladí la cosa, entre los círculos de derecha y extrema derecha está muy extendida en la actualidad la idea de que no ha habido cambio de régimen (los húngaros lo suelen llamar "rendszerváltás"). La razón es que no ha llegado "el paraíso" que esperaban, el nivel de vida ha bajado y además la antigua nomenclatura comunista ha conseguido recuperar en parte el poder, y es que muchos de los antiguos dirigentes comunistas hoy gobiernan con los colores de la socialdemocracia, basta con que mencionemos a los ex-primer ministros Gyula Horn o Ferenc Gyurcsány.

Pesty califica este tipo de opiniones de demagogia pura. Por supuesto que hubo cambio de régimen (él fue de los participantes en los acontecimientos). Sin embargo el entrevistador intenta profundizar en el tema: ¿cómo se le puede explicar a una de esas personas que no ha sentido ningún beneficio por la caída del comunismo que mereció la pena? (hay que destacar que a ese grupo quizás pertenezca la mayoría de la población húngara).

No sé si el entrevistador lo hace intencionadamente o solo es casualidad, en la propaganda del Partido Comunista Obrero Húngaro (comunista), se hace incapié en esa idea: ¿han merecido la pena estos veinte años?

Pesty lo tiene claro, por supuesto que ha merecido la pena. Hemos conseguido la libertad. Si no hubiera habido cambio de régimen no estaríamos en el estudio discutiendo de este asunto.

El periodista no queda muy convencido. ¿Tan importante es la libertad? ¿Es tan importante la libertad para una persona que a fin de cuentas no se ocupa de la política o como mucho va a hablar de ella solo con su círculo familiar más cercano?

El entrevistado da una respuesta bastante típica, por supuesto para esa gente no. En todas las sociedades hay gente ciega que rechaza a sus libertadores. Para ellos evidentemente la caída del comunismo no ha traído nada bueno.

Aquí me detengo un momento, porque es algo importante. Me parece que Pesty y su entrevistador tienen un punto de vista bastante limitado y cerrado de lo que es la libertad. A mi me parece que la libertad es otra cosa, pero no voy a discutir ahora de ello, solo quiero destacar que Pesty reconozca que para parte de la población (la mayoría) la caída del comunismo no ha traído nada bueno. No deja de ser curioso oírlo de labios de alguien que participó activamente en la caída del régimen anterior. Pero continuemos, porque lo siguiente no tiene desperdicio:

Para esta gente la caída del comunismo no significó nada bueno porque "junto a la libertad trajo también la miseria". "Puede que fueramos demasiado inocentes. Lo fuimos, pensábamos que las cosas serían mucho mejor. Contábamos con un cambio social mucho más grande. No pensábamos que el nivel de vida bajaría o que se extendería tanto la pobreza por Hungría. No sabíamos que la corrupción iba a convertirse en un problema tan grave. (...) No sabíamos que algunas empresas iban a limitar el trabajo de los sindicatos. No sabíamos que llegaría un momento en el que desaparecerían líneas de ferrocarril, escuelas, hospitales, no pensamos en muchas cosas, y lo que menos pensamos aún fue que la élite postcomunista regresaría al poco tiempo con otro nombre fortalecida y de paso tomaría el poder. En definitiva la antigua élite ha permanecido. Eso no llegamos a pensarlo en ningún momento".

(comentar sólo que por falta de dinero desde la caída del comunismo se han cerrado hospitales, escuelas, líneas de ferrocarril que unían pueblos, etc).

La continuación también es sorpendente, el entrevistador le pregunta qué pensaban conseguir, cómo veían la nueva Hungría en ciernes. "Pensábamos que recuperaríamos el terreno perdido con los países occidentales". "Pensábamos que estaríamos como en Viena".

La respuesta es cuando menos chocante, sobre todo si pensamos que el atraso de los países de Europa Central y Oriental respecto a Occidente viene de largo, y era algo característico de la zona mucho antes de que se instalaran allí gobiernos comunistas. Basta con echar un vistazo a un libro de historia para saberlo. De hecho, en el caso que nos ocupa, la Hungría de los años 30 era mencionada en muchos lugares como "el país de los tres millones de mendigos".

Pesty continúa: "éramos jóvenes e inocentes y pensábamos que todos los males eran culpa del sistema de partido único y de la economía basada en la planificación socialista. Pensábamos que el sistema multipartidista y la economía de mercado resolverían esos problemas automáticamente".

(cartel del Fidesz para las primeras elecciones tras la caída del comunismo. Por aquel entonces era un partido liberal, practicamente la asociación juvenil de los liberales del SzDSz, luego tras el varapalo de la derecha en las segundas elecciones ocupó todo el espacio a la derecha política - a veces también el de la extrema derecha - hasta hoy. Por supuesto estos criterios de "derecha" e "izquierda" son discutibles, para muchos el programa económico del Fidesz está más a la izquierda que el de los socialistas - los socialistas lo acusaron no hace mucho de ser directamente comunista. Tessék választani: por favor, elija)

El entrevistador habla luego de otro tema interesante, hasta qué punto el cambio de régimen fue un movimiento de masas o la consecuencia de una élite intelectual minoritaria, quizás de entre 3 mil- 5 mil personas. La pregunta tiene su miga porque en general se suene mencionar (fuera de Hungría) los acontecimientos de 1989 como uno de los casos típicos de "revolución desde arriba", el cambio de régimen fue algo pactado entre las élites comunistas reformadoras y los disidentes, no hubo tiempo a que hubiera una presión real desde abajo, o al menos una presión fuerte, como pudo haber quizás en otros lugares (digamos la RDA). Evidentemente el entrevistado se muestra contrario a esta idea y afirma que también entonces hubo manifestaciones multitudinarias con decenas de miles de participantes. Según él, una de las cosas que demuestran que los movimientos partidarios de la caída del comunismo eran populares fue que en las primeras elecciones "libres" estos partidos triunfaron, los socialistas en cambio, fracasaron (en las elecciones de 1990 los socialistas no llegaron al 11% de los votos, el resto de los partidos del parlamento estaban vinculados al movimiento anticomunista, los comunistas quedaron fuera con menos de un 4% de los votos). El entrevistador le recuerda entonces que eso fue un periodo relativamente corto, ya que en las siguientes elecciones los socialistas consiguieron la victoria. (En 1994 los socialistas se hicieron con la mayoría absoluta de los escaños en el parlamento, al lograr un 33% de los votos, el MDF, del gobierno anterior, sufrió un varapalo impresionante quedándose en un 12% y desde entonces no levantan cabeza, luchan continuamente por no desaparecer). El entrevistado asiente, sí, pero no fue en 1989-90, sino después. En su opinión, en 1989 la mayoría de la gente deseaba el cambio de régimen.

Luego continúan hablando de las consecuencias de los cambios: "Sabíamos lo que queríamos, claro que no queríamos lo que hay ahora. Queríamos capitalismo, libertad de mercado, multipartidismo, libertad. Lo que no teníamos claro eran las consecuencias que traerían estas cosas".

El entrevistador sigue poniendo el dedo en la llaga: ¿Qué le podemos decir a una persona que siente que el cambio de régimen no ha merecido la pena? ¿Qué decirles a esa mayoría de personas que piensan con nostalgia en la época comunista?

"Es cierto que hay una nostalgia por la época de Kádár, por el pan barato, por las salchichas baratas, por la cerveza barata. Pero por otro lado también hay esa nostalgia porque la sociedad sufre de anmnesia. Sencillamente han olvidado la historia, en parte porque no les interesa y en parte porque les interesa pero la han olvidado".

Me parece una forma de despreciar la gente que piensa de otra manera. Es muy fácil criticar al que no tiene pan, sobre todo cuando uno no tiene ese problema. Por lo demás me parece que las cosas son más complicadas que eso. Y que hable de amnesia quien ha demostrado una falta de luces increible (pienso en eso de alcanzar a Occidente). De hecho el propio entrevistador lo ve también así y le hace una curiosa observación: "¿Y si es así porque los crímenes del régimen anterior no les han sucedido a ellos, sino solo a los que estaban en contra del régimen?. "

Evidentemente cada cual valoras las cosas según su situación personal, esto es lógico. Yo he conocido intelectuales que sufrieron en mayor o menor medida persecución durante la época comunista, evidentemente son anticomunistas. Pero mucha gente, la mayoría, no sufrió esos problemas. También en la valoración del capitalismo podemos hacer el mismo análisis, a fin de cuentas, si László Pesty fuera un mendigo, o una persona sin hogar, quizás no mencionaría tantas veces la palabra "libertad" en su discurso, como lo hace. Entre otras cosas por que la libertad es algo mucho más profundo que poder hablar mal del que tiene el poder, o poder elegir cada cuatro años quién te va a explotar (¿de verdad tenemos la opción de poder decidir? creo que muchas personas en países occidentales tienen muy claro que no, y de ahí la alta abstención en muchos lugares). El propio entrevistador lo plantea cuando afirma: qué les podemos decir a la gente que no tiene tiempo para escuchar por ejemplo este programa porque tienen que tener dos trabajos para poder sobrevivir. Para ellos, ¿ha merecido la pena?

(tengo aún pendiente un artículo sobre 1989 y otro sobre 1956... pero son temas complejos de los que me gustaría escribir en profundidad y eso requiere leer mucho, y analizar, así que en esas estoy).

NOTA: La idea original era haber transcrito exactamente la entrevista, pero era demasiado larga, además tenía que hacerlo mientras escuchaba el programa ya que no encontré el texto escrito, y por último a mitad del trabajo se me borró todo -cosas de la informática- por eso finalmente he dejado solo un resumen de la parte que me pareció más interesante. Espero que con este artículo se pueda entender un poco mejor el tema de la nostalgia por el comunismo, y también el avance de la extrema derecha, sobre todo entre los jóvenes, que surge de un rechazo absoluto a los 20 años de capitalismo (y también, es cierto, a los años de comunismo).

jueves, 22 de octubre de 2009

La caja de música

Hace años quedé impresionado por la película "La caja de música" de Costa Gavras, cuyo guionista era de origen húngaro, Joe Eszterhas. Cuenta la historia de un emigrante húngaro en Estados Unidos que es acusado de haber cometido crímenes durante el régimen fascista de las Cruces Flechadas. Su hija, una prestigiosa abogada se encargará de su defensa. Poco a poco, según avanza la investigación, su hija empieza a tener dudas de la inocencia de su padre y finalmente se dará cuenta de que la acusación es cierta. Me da que Eszterhas sabía muy bien de qué escribía.

Lo que viene ahora, por desgracia, no es el guión de una película.

El 8 de noviembre 1944 un joven judío de Budapest, Péter Balázs, de 18 años, que había evitado ser internado por llevar papeles falsos, fue reconocido en el tranvia por un conocido perteneciente al ejército húngaro. El conocido lo detuvo y lo llevó al cuartel de la avenida Arena 51 (hoy György Dózsa). Lo encerró en una habitación y él y varios de sus colegas lo torturaron durante horas hasta que el joven murió. Después los asesinos cogieron el cuerpo, lo llevaron a la orilla del Danubio, le ataron piedras y lo arrojaron al río. Károly Zentai, Béla Máder y Lajos Nagy fueron los tres "valientes" que mataron a un chaval cuyo único crimen era ser judio y no llevar la estrella de David.

Tras la guerra, en 1945, Béla Máder fue entregado por el ejército norteamericano a las autoridades húngaras y el 21 de marzo de 1946 fue condenado a cadena perpetua, pero solo cumplió condena hasta 1956. Lajos Nagy fue detenido por los soviéticos y el 26 de febrero de 1948 fue condenado a muerte por el asesinato de Péter y por otros crímenes. Sin embargo el presidente le conmutó la pena a cadena perpetua. En 1956, durante el levantamiento húngaro anticomunista fue liberado y luego huyó del país.

El tercer criminal, Károly Zentai o Charles Zentai, que reconoció a Péter en el tranvía, había sido su instructor levente (una especie de servicio paramilitar obligatorio en la Hungría de entreguerras), por eso conocía al chico. Huyo a Alemania Occidental, en 1948 el gobierno húngaro pidió su entrega al ejército norteamericano, pero por el enfriamento de las relaciones este-oeste los norteamericanos no llegaron a entregarlo. A pesar de todo Zentai prefirió poner tierra de por medio, primero fue a Italia y luego, en 1950, a Australia. En 1956 le fue concedida la nacionalidad y allí ha vivido hasta el día de hoy. El gobierno húngaro lo condenó en ausencia en 1948 y ha intentado en varias ocasiones su extradición, sin éxito. Finalmente, en agosto del 2008 un juez australiano ordenó la entrega de Zentai a Hungría para ser juzgado. El 20 de agosto del 2008 el anciano, que tenía entonces 86 años, fue detenido por la policía australiana. Pero luego fue dejado en libertad y recurrió la sentencia. Por fin, el 8 de octubre de este año, el juzgado de Perth ha rechazado el recurso de Zentai y ha declarado que el susodicho puede ser entregado a las autoridades húngaras. Hoy mismo ha ingresado en prisión. Su entrega a Hungría tendrá lugar en un plazo de 14 días como mucho, aunque entre tanto pueden pasar algunas cosas aún, como por ejemplo que la familia del acusado recurra al tribunal supremo, aunque los altos costes judiciales lo hacen poco probable. La otra opción es que el ministro del interior no permita su extradición, ya que la ley permite que la última palabra sea la suya; así que la familia del acusado se ha dirigido al ministro.

(Károly Zentai en la actualidad. Foto: origo.hu)

Sinceramente, por mucho que tenga el aspecto de un frácil anciano, no me gustaría estar en la misma habitación, respirar el mismo aire que una persona capaz de cometer un crimen así. Me da igual que hayan pasado más de 60 años. Matar a alguien es un crimen brutal, horrible, despreciable. Y este señor debería haberse pasado toda su vida en la cárcel, ojalá se pase lo poco que le queda. Y todavía se queja, si le extraditan a Hungría será para ser juzgado nuevamente, quizás ni siquiera sea condenado. Lo curioso del caso es que el señor todavía tiene la cara de afirmar que no hay garantías en Hungría de un juicio justo, que no hay democracia en el país. Y yo debo creerme que hay justicia y democracia es un país que ha protegido durante más de 50 años a un asesino. Quizás es que la democracia es para estos señores lo que había en Hungría en 1944. Sus abogados han llegado a argumentar que lo sucedido no era un crimen en la Hungría de la época (el país estaba bajo el terror del fascismo, los cruces flechadas). Zentai se defiende afirmando que el no estaba en el país en el momento del asesinato, pero tampoco consta en ningún lado que hubiera desertado o algo parecido, además en los juicios de los otros dos asesinos, tanto ellos como los testigos mencionan a Zentai. Y cuando solicitó la ciudadanía australiana escribió que había huído de Budapest en 1945.

Zentai es el número 7 de la lista de los criminales nazis más buscados, según el Centro Simon Wiesenthal.


Fuentes: index.hu, hvg.hu, beszelo.c3.hu, origo.hu

miércoles, 14 de octubre de 2009

S O L A R I S

Solaris es un grupo de rock progresivo, uno de los clásicos del género no solo en Hungría.

(Portada de su disco Crónicas marcianas, de 1984)

El grupo fue creado en 1980 y tomó el nombre de la novela homónima del escritor polaco de ciencia-ficción Stanislaw Lem. La elección del nombre no fue casual ya que la ciencia-ficción es un elemento presente en toda la obra del grupo, muchas de sus canciones más famosas tienen como referente alguna obra clásica del género, por ejemplo las Crónicas marcianas de Ray Bradbury o El regreso del Viking (A Viking visszatér), de Péter Zsoldos, considerada quizás la mejor novela húngara de ciencia-ficción.

1. El regreso del Viking:



(nota: el video no es el oficial, y el que lo hizo no sabía a qué se refería el título, así que pensó que se trataba de los vikingos)

2. Crónicas marcianas:



3. Solaris:



Fuentes: http://metalliumhungaricum.blogspot.com y wikipedia húngara