Adiós a Malév

Estaba preparando una entrada sobre las líneas aéreas húngaras, la Malév (Magyar Légiközlekedési Vállalat - Compañía Húngara de Transporte Aéreo), con el título ¿Adiós a Malév?, pero ya no hace falta escribir los signos de interrogación. Aunque como tal Malév sigue existiendo, su final es cuestión de horas. Y en cualquier caso, desde esta mañana, viernes, 3 de febrero del 2012, se ha paralizado la actividad de la compañía, dejando, eso sí, a miles de pasajeros en tierra. Como suele suceder los que pagan los platos rotos son siempre los mismos, en este caso unos 7200 viajeros, que esperaban sus vuelos en Hungría u otros lugares, además de unos cuantos  miles de afectados que compraron sus billetes para los próximos meses (hasta hoy mismo se podían comprar billetes de avión de Malév). Especialmente problemática es la situación de unos tres mil pasajeros que están en otros países y no podrán volver a casa fácilmente.

(Último vuelo de Malév. Foto: index.hu)

La situación económica de Malév, a pesar de la subida de facturación del 2011 y el crecimiento en el número de pasajeros, era insostenible.  Hace unos días se anunció que ni siquiera quedaba dinero ni para comprar queroseno, ya que debía hacerlo con efectivo, por sus deudas y las noticias sobre su situación no podía hacerlo a crédito. 

El último golpe a Malév fue una decisión de la Comisión Europea, en enero de este año, que juzgó ilegales las ayudas estatales recibidas por la empresa entre el 2007 y el 2010,  y la obligaba a devolver la cantidad en cuestión, 88 mil millones de forint (algo así como 300 millones de euros).

Así que, a nadie le ha sorprendido este final, a pesar de que incluso diez minutos antes de anunciarse la cancelación definitiva de todos los vuelos, la dirección de la empresa seguía tranquilizando a la opinión pública y a los pasajeros, afirmando que el procedimiento de quiebra, iniciado el jueves, no suponía el final de la compañía ni la supresión de los vuelos programados. 

El gobierno húngaro estudia urgentemente la posibilidad de crear una nueva compañía aérea húngara o no hacerlo. Pero el mal ya está hecho y las pérdidas serán inmensas para la economía húngara.

Pasajeros en el aeropuerto de Ferenc Liszt de Budapest, tras saberse la cancelación de todos los vuelos de Malév. Fuente: index.hu

Eso sí, no todos salen perdiendo.  La principal empresa propietaria del aeropuerto Ferenc Liszt, de Budapest (antiguo Ferihegy, le cambiaron el nombre durante la fiebre por renombrar todo del actual gobierno húngaro), la empresa alemana Hochtief, que posee el 40%,  posiblemente se lleve un buen pellizco del gobierno, ya que en el acuerdo de privatización del aeropuerto se especifica que si el número de pasajeros desciende de un nivel determinado, el estado húngaro deberá indemnizar a la empresa. Dado que Malév es la principal compañía que actua en el aeropuerto, es bastante probable que eso suceda. Además, según algunos expertos, también saldrán ganando las compañías que tenían vuelos conjuntos con Malév (como Iberia), ya que de golpe se convierten en las únicas compañías que vuelan a Budapest, con lo cual es bastante probable que en los próximos meses haya escasez de asientos con destino a Budapest y las compañías puedan subir los precios de los billetes. Lo mismo pasará previsiblemente con las compañías de bajo coste, que ya han anunciado que reforzarán sus vuelos a Budapest. 

La compañía Malév fue creada el 25 de noviembre de 1954, cuando el gobierno húngaro compró la parte soviética de la empresa soviético-húngara Maszovlet, que desde 1946 prestaba servicios para Hungría. Tras la caída del régimen comunista fue privatizada en varias ocasiones y de nuevo nacionalizada en otras tantas. En la actualidad el estado húngaro controlaba la mayoría de las acciones de la empresa (el 95%), pero eso tampoco la ha salvado de la quiebra.

 

Y ahora, ¿cuál será la siguiente? ¿la empresa de transporte público de Budapest (el BKV)?


Fuentes: origo.hu, index.hu