lunes, 26 de enero de 2009

Tormenta en Hortobágy (Vihar a Hortobágyon)


Cuadro de 1903 pintado por Tivadar Kosztka Csontváry (nacido en 1853 en Kisszeben- en la actualidad es la ciudad eslovaca de Sabinov - y fallecido en 1919 en Budapest). Csontváry es una de las figuras más peculiares de la cultura húngara. Empezó a pintar de manera casual a la edad de 27 años y fue prácticamente un autodidacta; recorrió numerosos países para conocer regiones diferentes y aprender a pintar. En vida su obra no fue admirada como debiera, y sus escritos y su carácter excentrico, extravagante y esquizofrénico fueron incluso objeto de burla. Y sin embargo creó un mundo pictórico único e inigualable, cercano al expresionismo y al postimpresionismo, aunque difícilmente encuadrable en algún estilo concreto. Su obra estuvo a punto de perderse para la posteridad, y solo se salvó de una destrucción casi segura gracias a Gedeon Gerlóczy, un famoso arquitecto, que las compró, las protegió y las dio a conocer con una exposición en 1930.

Aquí ya se presentó otra célebre obra suya - mi preferida, por cierto: El cedro solitario

(La copia del cuadro es de la wikipedia. Fuentes: wikipedia, Arte en Hungría)

3 comentarios:

Magda Díaz Morales dijo...

Hay que agradecerle a este arquitecto. El cuadro es precioso, con mucho significado.

El cedro solitario es una belleza, muy etéreo.

Te dejo un abrazo.

jozko dijo...

!Hola Magda! Cuanto tiempo... :)

es curioso a veces de lo poco que depende el que podamos disfrutar o no de una obra maestra...

Por cierto, me gustó mucho tu post sobre Tibor Déry (es de la época en la que me quedé sin internet, así que la leí el otro día, con mucho retraso). Quise escribir algo, pero de alguna manera el sistema no me dejó. Uno de los primeros textos que leí en húngaro fue precisamente "Amor", tanto que estaba pensando traducirlo para mi blog (aunque lo veo difícil porque textos de tal tamaño en un blog son un poco enfarragosos de leer), no sabía que estaba en español. Es una buena noticia.

!Un abrazo para tí también!

Mario Rosaldo dijo...

Jozko:

Quizá tienes razón; el "abstraccionismo", o cuidada sencillez, de El cedro solitario contrasta con el "expresionismo" de otros cuadros de Tivadar Kosztka Csontváry y lo hace destacar entre todos (al menos esa es mi primera impresión). Su manejo de la perspectiva es interesante y remite sin duda a ambas tendencias pictóricas.